Quién soy

La mayoría de gente dedica un valioso tiempo a decir con palabras quién es, pero yo no creo que eso sirva de algo. No creo que seamos meramente palabras autocomplacientes, sino más bien algo un tanto más metafísico. Tal vez seamos un compendio de ideas, pensamientos e ilusiones, y muchas de esas cosas las podrás encontrar en este blog, si te dignas a buscar; tal vez un pedazo de carne con huesos, músculos y órganos que nos fuerzan -y con muy mala leche a veces- a vivir el día a día; o, quién sabe, tal vez una máquina híbrida que vive en este mundo gracias a las ideas rebosantes de ilusión. El resultado da igual. Nada cambia. Seguimos viviendo en esta búsqueda irrelevante de sentido mientras tenemos fuerzas suficientes para hacerlo.

Yo imagino cómo debe ser llegar al final de esa búsqueda, cuando por fin hallas lo que anhelabas encontrar durante prácticamente toda tu vida, descubriendo que realmente has perdido tu tesoro mientras buscabas lo invisible, pero no inapreciable, y descubriendo que aquella cosa tan increíble era el tiempo, aquel que ahora llega a su fin.

No sé muy bien porqué escribo esto, pero tal vez me defina mejor que unas simples palabras autocomplacientes.

¿Ahora? Voy a aprovechar el tiempo, o eso creo -menudo chascarrillo-.

No hay comentarios:

Publicar un comentario